11 de septiembre de 2010

EDITORIAL

EDITORIAL

Si el extraordinario fragmento de existencia asignado a los hombres, tuviera una duración más prolongada, todos nos daríamos clara cuenta del movimiento social, de las tendencias que se abren paso violentamente y de las fuerzas que se le oponen, de las olas y marejadas que tironean la historia hacia un lado y hacia otro, en función siempre a la satisfacción de las nuevas dificultades que presentan las clases para instalarse en el dominio del mundo.

Nos ha tocado presenciar el fin de un imperio, como una supernova, como una estrella que se apaga, sus fulgurantes destellos no auguran más que su fin. Pero eso no ocurre de un día para otro. Y vemos cómo el pobre hombre se apuesta, sin embargo, a la brevedad de una luz que solo garantiza oscuridad. Nos dijeron que las ideologías habían muerto. En realidad, se referían a la ideología del proletariado. Porque quisieron que la ideología dominante por siempre fuera la del capitalismo y su corte de vendedores. Pero atendiendo el sentido común de sus demandas y de las necesidades más urgentes, los pueblos del mundo van develando verdades que potencian su existencia.

Los cantos de sirena de la burguesía, bajo la forma de conceptos como era del conocimiento, nuevas tecnologías, marketing, sociedad post moderna, fueron susurrados a los oídos de nuestros jóvenes durante una o dos generaciones, y ahora, tanto aquí como en el mundo, ante el incontrastable fracaso del neoliberalismo y la globalización, muchos optan por una mirada crítica al sistema, pero también otros, muchos otros deciden participar resueltamente en la construcción de una nueva izquierda, una izquierda que enarbole con propiedad el ideario proletario de la transformación de la sociedad.

Cuanto tiempo más, cuanto tiempo menos. No lo sabemos. Cuánto costo y represalia, cuánta necedad y bajeza aún nos falta conocer. Mientras tanto, veamos firmemente la posición, las líneas de la construcción, de los que trabajan por los conjuntos, de aquellos que prefieren las acciones a los comentarios bajo la mesa, La contradicción nos acompaña en todo momento, y cuanto más en la demanda de unidad que claman nuestros pueblos, para poner fin al momento más ardiente de la historia del Perú: el conflicto interno, del que siguen pendientes heridas todavía abiertas, y con las que trafican los comerciantes del odio y la venganza. No pasarán. La reconciliación y la amnistía general es una necesidad nacional.

EL DIRECTOR


 



!NO A LA CRIMINALIZACIÓN DE IDEAS Y OPINIONES!

Lima, 28 de junio de 2010

Sr. Aldo Mariátegui
Director del Diario “Correo”
De mi consideración:

Con fecha 21 de junio del pte., en la primera plana de su periódico, como parte de una secuela acusadora, aparezco resaltado en un círculo, con el título alarmista “¡Lo advertimos!” Escribo esta nota para decirle que Ud. tiene la libertad de dedicarse a cazar fantasmas, a la calumnia y a la mentira. Esa es su opción. Pero no le permito que criminalice mi actuación como hombre dedicado a la actividad cultural pública de mi país en los últimos 40 años, durante los cuales –como antropólogo, escritor y director de teatro que soy– además de muchas actividades diversas y publicaciones propias, tuve recientemente el honor de participar en la presentación del libro “De Puño y Letra” del Dr. Abimael Guzmán, que aunque a Ud. no le guste, es el más destacado intelectual peruano de los últimos tiempos. No puede tampoco limitar mi participación política en la agrupación que decida yo participar, de acuerdo a las libertades que ampara la Constitución vigente. Soy adherente del Movimiento por Amnistía y Derechos Fundamentales (MOVADEF) que está participando en el próximo proceso electoral, y suscribo su propósito de luchar por una amnistía general, una solución política a los problemas derivados del conflicto interno y la reconciliación que tanto demandan nuestros pueblos. Esa es mi opción. Y aunque está Ud. muy lejos de una figura tan elevada como José Carlos Mariátegui, permítame subrayarle que, como él, y guardando las debidas distancias, soy simplemente un peruano con una posición clasista.

Exijo la publicación de esta carta, atendiendo a mi derecho a la rectificación que me asiste, según ley.

Alberto Mego Márquez
Director de la Revista “Culturales 1º de Mayo”
Plaza Bolognesi 540 A
DNI 10404017

No hay comentarios: